domingo, 25 de julio de 2010

Nació Marianito......

Chicos tenemos sobrino..........


Nació Mariano el bebé de Andrea con 3.00 Kg. tanto el niñito como la maá bárbaro, una alegría total....
A mis compañeritos de periodismo:

Nos dijo el profe, tienen que escribir algo con respecto al blog que tienen y para que les sirve.

Particularmente a mi me sirvió, para conocer a un grupo muy especial de personas tanto profesores como alumnos, a las que aprecio, por ejemplo leer los artículos que baja Quique, muy interesante por cierto, yo no puedo aportar mucho, pero ... ya va a pasar profe, a mi compañerita Andrea, al resto de los chicos y de esta manera indirecta conocer las personalidades de mis compañeros que son unos tipo re-macanudos y divertidos, compartir mi tiempo con ellos me encanta.

Y los profesores! con Silvana ni hablar, es "la profesora", una capa total, me encanta como nos transmite con sabiduría su materia, lo mismo Javier, que a más de uno nos hizo ver que podemos escribir más allá de lo que creíamos, cada uno con su materia nos enseñan a amarla, entenderla, espero no los decepcionemos, creo que a pesar de los trabajos de cada uno, u otras actividades tratamos de dar lo que podemos.

Lo mío es muy sencillo, por una cuestión ajena a mi, no me puedo presentar a rendir los finales, pero lo voy hacer a fin de año, y me la banco, bua...... mentira tengo un odio .....

miércoles, 30 de junio de 2010

Carta del Jefe indio Seatle
al presidente de los Estados Unidos

En 1854, el presidente de los Estados Unidos hizo la propuesta de comprar gran parte de sus tierras a una tribu india, ofreciéndoles en contrapartida, la concesión de otra "reserva".
La carta de respuesta del Jefe Seatle, distribuida por la ONU, y más adelante publicada íntegramente, ha sido considerada, a través del tiempo, como uno de los más bellos y profundos pronunciamientos hechos sobre la defensa del medio ambiente.
Ésta es una de las versiones más en uso.

"¿Cómo se puede comprar o vender el firmamento, ni aun el calor de la tierra? Dicha idea nos es desconocida.

Si no somos dueños de la frescura del aire ni del fulgor de las aguas ¿cómo podrían Uds. comprarlos?

Cada parcela de esta tierra es sagrada para mi pueblo. Cada brillante mata de pino, cada grano de arena en las playas, cada gota de rocío en los oscuros bosques, cada altozano y hasta el sonido de cada insecto es sagrado a la memoria y al pasado de mi pueblo. La savia que circula por las venas de los árboles lleva consigo las memorias de los pieles rojas.

Los muertos del hombre blanco olvidan su país de origen cuando emprenden sus paseos entre las estrellas; en cambio, nuestros muertos nunca pueden olvidar esta bondadosa tierra, puesto que es la madre de los pieles rojas. Somos parte de la tierra y, asimismo, ella es parte de nosotros. Las flores perfumadas son nuestras hermanas; el venado, el caballo, la gran águila; éstos son nuestros hermanos. Las escarpadas peñas, los húmedos prados, el calor de! cuerpo del caballo y e! hombre, todos pertenecemos a la misma familia.

Por todo ello, cuando el gran Jefe de Washington nos envía el mensaje de que quiere comprar nuestras tierras dice que nos reservará un lugar en el que podamos vivir confortablemente entre nosotros. Él se convertirá en nuestro padre y nosotros en sus hijos. Por ello consideramos su oferta de comprar nuestras tierras. Ello no es fácil, ya que esta tierra es sagrada para nosotros.

El agua cristalina que corre por ríos y arroyuelos no es solamente agua sino también representa la sangre de nuestros antepasados. Si les vendemos la tierra deben recordar que es sagrada y deben enseñar a sus hijos que es sagrada y que cada reflejo fantasmagórico en las claras aguas de los lagos cuenta los sucesos y memorias de las vidas de nuestras gentes. El murmullo del agua es la voz del padre de mi padre.

Los ríos son nuestros hermanos y sacian nuestra sed; son portadores de nuestras canoas y alimentan a nuestros hijos. Si les vendemos nuestras tierras, Uds. deben recordar y enseñarles a sus hijos que los ríos son nuestros hermanos y también lo son suyos, y, por tanto deben tratarlos con la misma dulzura con que se trata a un hermano.

Sabemos que el hombre blanco no comprende nuestro modo de vida. El no sabe distinguir entre un pedazo de tierra y otro, ya que es un extraño que llega de noche y toma de la tierra lo que necesita. La tierra no es su hermana, sino su enemiga, y una vez conquistada sigue su camino, dejando atrás la tumba de sus padres sin importarle. Le secuestra la tierra a sus hijos.
Tampoco le importa. Tanto la tumba de sus padres como el patrimonio de sus hijos son olvidados. Trata a su madre, la tierra, y a su hermano el firmamento como objetos que se compran, se explotan y se venden como ovejas o cuentas de colores. Su apetito devorará la tierra dejando atrás sólo un desierto.

No sé, pero nuestro modo de vida es diferente al de Uds. La sola vista de sus ciudades apena los ojos del piel roja. Pero quizá sea porque el piel roja es un salvaje y no comprende nada.

No existe un lugar tranquilo en las ciudades del hombre blanco, ni hay sitio donde escuchar cómo se abren las hojas de los árboles en primavera o cómo aletean los insectos. Pero quizá también esto debe ser porque soy un salvaje que no comprende nada. El ruido sólo parece insultar nuestros oídos. Y, después de todo ¿para qué sirve la vida si el hombre no puede escuchar el grito solitario del chotacabras ni las discusiones nocturnas de las ranas al borde de un estanque?

Soy un piel roja y nada entiendo. Nosotros preferimos el suave susurro del viento sobre la superficie de un estanque, así como el olor de ese mismo viento purificado por la lluvia del mediodía o perfumado con aromas de pinos.

El aire tiene un valor inestimable para el piel roja, ya que todos los seres comparten un mismo aliento, la bestia, el árbol, el hombre, todos respiramos el mismo aire. El hombre blanco no parece consciente del aire que respira; como un moribundo que agoniza durante muchos días es insensible al hedor, pero si les vendemos nuestras tierras deben recordar que el aire nos es inestimable, que el aire comparte su espíritu con la vida que sostiene. El viento que dio a nuestros abuelos el primer soplo de vida también recibe sus últimos respiros. Y si les vendemos nuestras tierras, Uds. deben conservarlas como cosa aparte y sagrada, como un lugar donde hasta el hombre blanco pueda saborear el viento perfumado por las flores de las praderas.

Por ello, consideramos su oferta de comprar nuestras tierras. Si decidimos aceptarla yo pondré una condición: el hombre blanco debe tratar a los animales de esta tierra como a sus hermanos.

Soy un salvaje y no comprendo otro modo de vida. He visto a miles de búfalos pudriéndose en las praderas, muertos a tiros por el hombre blanco desde un tren en marcha. Soy un salvaje y no comprendo cómo una máquina humeante puede importar más que el búfalo al que nosotros matamos sólo para sobrevivir.

¿Qué seria del hombre sin los animales? Si todos fueran exterminados, el hombre también moriría de una gran soledad espiritual; porque lo que sucede a los animales también le sucederá al hombre. Todo va enlazado. Deben enseñarles a sus hijos que el suelo que pisan son las cenizas de nuestros abuelos. Inculquen a sus hijos que la tierra está enriquecida con las vidas de nuestros semejantes a fin de que sepan respetarla. Enseñen a sus hijos que nosotros hemos enseñado a los nuestros que la tierra es nuestra madre. Todo lo que le ocurra a la tierra les ocurrirá a los hijos de la tierra. Si los hombres escupen en el suelo se escupen a sí mismos.

Esto sabemos: la tierra no pertenece al hombre; el hombre pertenece la tierra. Esto sabemos. Todo va enlazado, como la sangre que une a una familia. Todo va enlazado.

Todo lo que le ocurra a la tierra le ocurrirá a los hijos de la tierra. El hombre no tejió la trama de la vida; él es sólo un hilo. Lo que hace con la trama se lo hace a sí mismo.

Ni siquiera el hombre blanco, cuyo Dios pasea y habla con él de amigo a amigo, queda exento del destino común Después de todo quizás seamos hermanos. Ya veremos. Sabemos una cosa que quizá el hombre blanco descubra un día: nuestro Dios es el mismo Dios. Uds. pueden pensar ahora que Él les pertenece, lo mismo que desean que nuestras tierras les pertenezcan, pero no es así. Él es el Dios de los hombres y su compasión se comparte por igual entre el piel roja y el hombre blanco. Esta tierra tiene un valor inestimable para Él y si se daña se provocaría la ira del Creador.

También los blancos se extinguirán, quizá antes que las demás tribus. Contaminan sus lechos y una noche perecerán ahogados en sus propios residuos.

Pero Uds. caminarán hacia su destrucción rodeados de gloria, inspirados por la fuerza del Dios que los trajo a esta tierra y que, por algún designio especial, les dio dominio sobre ella y sobre el piel roja. Ese destino es un misterio para nosotros, pues no entendemos por qué se exterminan los búfalos, se doman los caballos salvajes, se saturan los rincones secretos de los bosques con el aliento de tantos hombres y se atiborra el paisaje de las exuberantes colinas con cables parlantes. ¿Dónde está el matorral? Destruido. ¿Dónde está el águila? Desapareció. Termina la vida y empieza la supervivencia".
¿Quien es Felcho?. Seguramente lo conocen si viven en Puerto Madryn, y ni hablar si son nativos de la ciudad. Nos hubiera gustado encarar su historia de vida desde su niñez, pero no encontramos a las personas indicadas para que nos cuenten esa etapa de su vida, justamente por las diferentes circunstancia de la vida.
Felcho es una persona alegre, respetuosa, pero por sobre todo luchadora. Seguramente muchos de nosotros nos quejamos en algún momento de problemas insignificantes, sin darnos cuentas que a metros de nosotros hay niños, adolescentes o inclusive adultos sin nuestra misma suerte. Felcho es uno de esos casos, fue abandonado de muy chico por sus padres en Puerto Madryn, se crió y sobrevivió en la calle con ayuda de algunos vecinos de la comunidad. Aproximadamente a sus 15 años, recorría diariamente las calles Juan B. Justo y 9 de julio, zona en la cual recibía la mayor atención de las vecinos en aquel entonces.
Cuando se sentía mal recurría a una de las primeras enfermeras del pueblo, Cuca además de asistirlo cuando estaba enfermo se encargaba de bañarlo en el patio de su casa los días de calor. Por su parte, el esposo lo bañaba en su propio baño cuando los días refrescaban, nunca faltaban las protestas y gritos por departe de Felcho, no le gustaba mucho el agua En la intersección de esas calles se encontraba una fiambreria, la dueña todas las mañanas preparaba un sanwichs, el cual Felcho no olvidaba de ir a buscar. Y a solo unos metros se encontraba la casa de los Hernández que todos los días al mediodía le preparaban un plato de comida caliente. Prácticamente todos ponían un grano de arena cuando Felcho necesitaba ropa. Varias veces intentaron sacarlo de la calle, pero los intentos fueron nula, sus noches la pasaba en la Terminal de Ómnibus.
Una mañana gris, fría y lluviosa, Manuel Olazábal y Luís Tapia trabajadores del Corralón Municipal, el cual se encontraba detrás de la Terminal de Ómnibus vieja, donde en este momento justamente se encuentra la nueva Terminal de Ómnibus. Encontraron a Felcho con un principio de neumonía, lo levantaron y los llevaron al Hospital. Luego de su recuperación, ubicaron a Felcho dentro del corralón en una habitación que hicieron exclusivamente para el con todas las comodidades básicas y a sus 20 años comenzó a dormir bajo techo. En este lugar fue donde aprendió las cosas mas básicas, como bañarse solo y hasta se hizo fanático de los perfumes, todos los meses los empleados del corralón juntaban plata para comprarle lo necesario a Felcho. Por otro lado estaban las familias que trabajaban en el Matadero Municipal, que en ese momento se encontraba a metros del Corralón, todos los días le ofrecían un plato de comida al tan querido Felcho. Entre esas familias se encontraban los Epulef, Mercado, ramos entre otras.
Los años fueron pasando, Madryn fue creciendo y necesitaba mas espacio. Por ese motivo el corralón fue mudado hacia el parque industrial liviano y se llevo consigo a Felcho. Allí se le armo una habitación más confortable, pero había otro problema, Felcho todos los días se iba para el centro que desde ese lugar le quedaba demasiado alejado. Una vez en el centro el se pasaba a desayunar en un conocido café y luego se iba a hacer los que mas le gusta y lo alegra, bailar y que mejor lugar que al frente de una desquería. Sin embargo este no fue el único problema que surgió, el corralón medio día los sábados y todo el domingo se mantenía cerrado, por lo cual se quedaba solo y sin ninguna atención.
Hoy en día Felcho, conocido también como Florencio Cabral por decisión propia hace 8 años que esta viviendo en el Hogar Hebra de Plata, con la atención que se merece cualquier persona en su situación. Cabe destacar que hace poco la directora del hogar busco y encontró su identidad, le podemos decir que nació un 22 de agosto de 1944 en la ciudad de Trelew, que tiene familiares en Puerto Madryn, pero no le vamos a decir su verdadero nombre por petición de la misma directora.
A sus 66 años sigue con una personalidad mas sociable sigue con la misma alegría, respeto y simpatia que siempre se gano un lugar en el corazón de todos. Le dedicaron una cancion, aparece en Internet, alguna vez tuvo protagonismo en los diarios y esta presente en los recuerdos de muchos. Todo un personaje, el es Felcho.










viernes, 25 de junio de 2010

ojos rojos.com......

si alguien sabe por fi me diga que hacer cuando te arden los ojos, tal cual un borracho, los ojos rojos hasta la.... se aceptan remedio casero, tengo anteojos..... pero no puedo leer, escribir, y me tiene muy soberanamente podrida, groserìas, y otras yerbas, abstenerse....

jueves, 24 de junio de 2010

Felcho


¿Quien es Felcho?. Seguramente lo conocen si viven en Puerto Madryn, y ni hablar si son nativos de la ciudad. Nos hubiera gustado encarar su historia de vida desde su niñez, pero no encontramos a las personas indicadas para que nos cuenten esa etapa de su vida, justamente por las diferentes circunstancia de la vida.
Felcho es una persona alegre, respetuosa, pero por sobre todo luchadora. Seguramente muchos de nosotros nos quejamos en algún momento de problemas insignificantes, sin darnos cuentas que a metros de nosotros hay niños, adolescentes o inclusive adultos sin nuestra misma suerte. Felcho es uno de esos casos, fue abandonado de muy chico por sus padres en Puerto Madryn, se crió y sobrevivió en la calle con ayuda de algunos vecinos de la comunidad. Aproximadamente a sus 15 años, recorría diariamente las calles Juan B. Justo y 9 de julio, zona en la cual recibía la mayor atención de las vecinos en aquel entonces.
Cuando se sentía mal recurría a una de las primeras enfermeras del pueblo, Cuca además de asistirlo cuando estaba enfermo se encargaba de bañarlo en el patio de su casa los días de calor. Por su parte, el esposo lo bañaba en su propio baño cuando los días refrescaban, nunca faltaban las protestas y gritos por departe de Felcho, no le gustaba mucho el agua En la intersección de esas calles se encontraba una fiambreria, la dueña todas las mañanas preparaba un sanwichs, el cual Felcho no olvidaba de ir a buscar. Y a solo unos metros se encontraba la casa de los Hernández que todos los días al mediodía le preparaban un plato de comida caliente. Prácticamente todos ponían un grano de arena cuando Felcho necesitaba ropa. Varias veces intentaron sacarlo de la calle, pero los intentos fueron nula, sus noches la pasaba en la Terminal de Ómnibus.
Una mañana gris, fría y lluviosa, Manuel Olazábal y Luís Tapia trabajadores del Corralón Municipal, el cual se encontraba detrás de la Terminal de Ómnibus vieja, donde en este momento justamente se encuentra la nueva Terminal de Ómnibus. Encontraron a Felcho con un principio de neumonía, lo levantaron y los llevaron al Hospital. Luego de su recuperación, ubicaron a Felcho dentro del corralón en una habitación que hicieron exclusivamente para el con todas las comodidades básicas y a sus 20 años comenzó a dormir bajo techo. En este lugar fue donde aprendió las cosas mas básicas, como bañarse solo y hasta se hizo fanático de los perfumes, todos los meses los empleados del corralón juntaban plata para comprarle lo necesario a Felcho. Por otro lado estaban las familias que trabajaban en el Matadero Municipal, que en ese momento se encontraba a metros del Corralón, todos los días le ofrecían un plato de comida al tan querido Felcho. Entre esas familias se encontraban los Epulef, Mercado, ramos entre otras.
Los años fueron pasando, Madryn fue creciendo y necesitaba mas espacio. Por ese motivo el corralón fue mudado hacia el parque industrial liviano y se llevo consigo a Felcho. Allí se le armo una habitación más confortable, pero había otro problema, Felcho todos los días se iba para el centro que desde ese lugar le quedaba demasiado alejado. Una vez en el centro el se pasaba a desayunar en un conocido café y luego se iba a hacer los que mas le gusta y lo alegra, bailar y que mejor lugar que al frente de una desquería. Sin embargo este no fue el único problema que surgió, el corralón medio día los sábados y todo el domingo se mantenía cerrado, por lo cual se quedaba solo y sin ninguna atención.
Hoy en día Felcho, conocido también como Florencio Cabral por decisión propia hace 8 años que esta viviendo en el Hogar Hebra de Plata, con la atención que se merece cualquier persona en su situación. Cabe destacar que hace poco la directora del hogar busco y encontró su identidad, le podemos decir que nació un 22 de agosto de 1944 en la ciudad de Trelew, que tiene familiares en Puerto Madryn, pero no le vamos a decir su verdadero nombre por petición de la misma directora.
A sus 66 años sigue con una personalidad mas sociable sigue con la misma alegría, respeto y simpatía que siempre se gano un lugar en el corazón de todos. Le dedicaron una canción, aparece en Internet, alguna vez tuvo protagonismo en los diarios y esta presente en los recuerdos de muchos. Todo un personaje, el es Felcho.